'En Nápoles se llora dos veces'

'En Nápoles se llora dos veces'
autoría: Gazteaukera,
Leire Cantero tiene 18 años y es vitoriana. Este año comenzará su segundo año en el grado de Ciencia y Tecnología de Alimentos. En verano ha participado en el programa Campos de trabajo y ha querido contarnos como fue su experiencia.
¿Cómo conociste el programa Campos de trabajo?
Lo conocía mi ama, tenía conocidos que habían participado y habían tenido muy buena experiencia. Yo lo he conocido este año.
¿Por qué decidiste participar e inscribiste en el programa?
Este verano quería hacer algo diferente, y como me encanta viajar me pareció buena idea. Hay una gran variedad de tipos de campos de trabajo, por ejemplo a mi me gusta mucho conservar el medio ambiente y participar en un campo que trabajara este tema me apetecía. También quería aprender más inglés y conocer a gente nueva, lo mejor de la experiencia.
¿A dónde has podido ir?
He estado en Italia, en Ottaviano, un pequeño pueblo cerca de Nápoles.
¿Cómo era el campo de trabajo de Italia? ¿Cuáles eran las actividades de un día normal?
Dos asociaciones eran las encargadas de organizar el campo de trabajo: Legambiente, trabajaba en el ámbito del medioambiente y Libera, era un grupo contra la Mafia. Realizábamos las actividades por la mañana y duraban unas 3-4 horas: cuidábamos el parque nacional Vesuvio, lo limpiábamos por la mañana y por la tarde teníamos tiempo libre para realizar otras actividades. Participamos en la preparación y presentación de un libro sobre el cambio climático, hablamos con la hermana de una víctima de la mafia ( fue muy emocionante) y también participamos en algunas fiestas. Hicimos un poco de turismo y visitamos Nápoles y Pompeya.
¿Cómo ha sido la relación con el resto de participantes del campo?
Hemos tenido una relación muy buena, realmente excelente. Aunque había diferencias culturales y de edad y no hemos tenido ningún problema entre nosotros. La relación con la gente italiana también ha sido estupenda, lo que más me ha gustado del campo de trabajo es la posibilidad de haber hecho amigos y amigas de todo el mundo y que nos sigamos todavía comunicando entre nosotros.
¿Cuales han sido los aspectos más positivos y los más negativos de esta experiencia?
Los primeros dos días el trabajo no estaba muy organizado y nos aburrimos un poco. Nos aburrimos porque todavía no nos conocíamos entre nosotros pero el resto de días fue estupendo. Una vez organizaron el campo de trabajo consiguieron crear un ambiente estupendo en el grupo. Para mi lo mejor ha sido conocer a gente nueva, he hecho muy buenas amistades en muy poco tiempo.
¿Con ganas de repetir?
Por supuesto
¿Recomendarías el programa campos de trabajo a la gente joven? ¿Por qué?
Me parece muy recomendable. El trabajo que realizas en un campo es beneficios para la gente y te sientes orgulloso de ello. Aprendes un montón, conoces idiomas nuevos, haces turismo y sobre todos conoces a un montón de gente increíble e interesante.
Algo más que añadir.
No fui muy animada, pensando que iba a ser la más joven y con nervios porque tenía que comunicarme en inglés. Aún así el tema de la edad no fue nada importante, y desde el principio hice amigos y amigas de todas las edades. En cuanto al inglés, desde el segundo día ya me solté y he de decir que he mejorado mucho mi nivel.
Quiero agradecer la oportunidad de vivir una experiencia así. Sin duda han sido las mejores semanas de todo el verano. Hecho mucho de menos ha la gente que conocí en Italia. El monitor que me acompaño al aeropuerto a la vuelta me dijo lo siguiente: En Nápoles se llora dos veces, cuando llegas porque no te gusta lo que ves, y cuando te vas, porque no quieres irte. Todas las personas que participamos en el campo de trabajo podemos afirmar que es verdad este dicho. De nuevo, eskerrik asko!