Aunque el sector privado también ofrece bolsas de trabajo, nos centraremos en el público. Una bolsa de trabajo, también llamada bolsa de empleo público, es creada por las Administraciones Públicas (Gobiernos Autónomos, Diputaciones, Ayuntamientos, agencias, Universidades públicas, Euskaltegis municipales, Escuelas de Idiomas, Escuelas de Música, Mancomunidades, etc.) y a través de ella cubren sus necesidades de personal temporal, sean bajas o vacantes, y también pueden dar respuesta a necesidades surgidas por acumulación de tareas o para la ejecución de programas de carácter temporal. Esta temporalidad de las bolsas de trabajo es una diferencia esencial con una la plaza fija obtenida al aprobar unas oposiciones.

Una bolsa de trabajo puede originarse tras un proceso selectivo para cubrir vacantes fijas. Una vez cubiertos esos puestos por quienes han obtenido los mejores resultados, las personas que han superado los ejercicios (u obtenido una nota concreta) pueden quedar en la bolsa; entonces, la administración que ha convocado la selección podrá recurrir a ellas en caso de que surjan otras necesidades de personal.

Otra variable es la constitución de las bolsas de empleo mediante procedimientos abiertos. Es decir, los ejercicios exigidos a las personas que se presentan tienen el objetivo exclusivo de conformar dicha bolsa. Insistimos, que el contrato tendrá siempre un carácter temporal, como funcionario o funcionaria interina, o como personal laboral de las Administraciones Públicas. No obstante, haber trabajado en una administración en un periodo determinado aporta una experiencia valiosa que se traduce en méritos en el caso de realizar una oposición.

Las personas interesadas en participar en estos procesos deben tener en cuenta que el primer paso para el acceso es cumplir todas las condiciones y los requisitos de la bolsa, y presentar toda la documentación en plazo, por lo que tienen que estar muy atentas a las fechas de presentación de solicitudes, documentación, etc.

El proceso selectivo puede exigir o valorar determinados méritos profesionales y/o formativos de muy diferente índole: perfiles lingüísticos, titulación básica mínima, titulación académica relacionada con el puesto, cierta nacionalidad, edad mínima o máxima, determinado carnet de conducir, experiencia laboral, cursos de formación realizados en un determinado período o con una duración mínima, etc.

Una vez que se comprueban los requisitos imprescindibles, finaliza el proceso selectivo y se hace pública la lista resultante. El orden de preferencia para quienes integran la bolsa es determinado por las puntuaciones obtenidas en los ejercicios y méritos del proceso selectivo, de mayor a menor. No siempre, pero sí frecuentemente, la superación de las pruebas obligatorias condiciona la permanencia en el proceso selectivo.

Habitualmente el proceso de registro se realiza electrónicamente, es decir, por internet, utilizando el DNI electrónico o certificado electrónico en vigor. Para inscribirse, hay que completar un cuestionario y darse de alta en el sistema indicando datos personales y de contacto. Una vez realizada la inscripción, se podrá acceder a la información de la bolsa, consultar las vacantes disponibles y realizar un seguimiento de la candidatura.